¿Qué hace que las pelis de terror den tanto miedo? Gran parte de la culpa es de iluminación.
Con el final del verano termina la estación de la luz, la abundancia y llega el otoño, la época de la oscuridad y la escasez. En este contexto, en fecha de Todos los Santos, en Zeferino queremos fijarnos en los secretos de iluminación que esconden las pelis de terror y que nos hacen pasar tanto miedo.
Si estás pensando en rodar una peli de terror quizás quieras aprender un poco sobre cómo grandes directores del género han usado la iluminación para crear ambientes y personajes terroríficos. Así como también descubrirás una técnica en concreto que suele afectar psicológicamente al público.
Distorsionar a través de la luz
La característica en común que comparten los métodos de iluminación de una peli de terror es que todos, en cierta manera, oscurecen o distorsionan la realidad. Iluminar desde abajo, las siluetas o proyectar sombras prominentes produce una completa distorsión del mundo real al que estamos acostumbrados. Por ejemplo, la luz proyectada desde abajo nos parece extraña y artificial, ya que nunca ocurre en la naturaleza. Nos remite al fuego proveniente de las profundidades del infierno y nos crea una “alarma inmediata”. Es muy difícil escapar del reconocimiento instintivo de esta luz infernal, que tan profundamente grabada está en nuestras mentes.
Las siluetas añaden un poco más de distorsión, porque no nos acaban de dar toda la información que necesitamos, como rasgos faciales o vestimenta.Esta distorsión aumenta aún más cuando aparecen sombras prominentes, ya que se apoya en el miedo a lo desconocido y a lo que no logras descifrar.
Oscurecer a través de la iluminación
El hecho de fijar un foco de luz, infrailuminar un elemento o por el contrario superiluminarlo, no distorsiona o esconde los sujetos en la imagen, simplemente hace que oscurezcan o que queden disimulados. Esto genera misterio, tensión y suspense, porque, aunque puedas ver parte de lo que está sucediendo en la pantalla, no puedes verlo todo. Tus ojos están intentando rellenar los huecos de la información que falta y normalmente lo que puedes imaginar es mucho más terrorífico que lo que hay en realidad. Esta es, a la práctica, la magia del terror.
Al final lo más importante de todas estas técnicas de iluminación es que son una manera de manipular y jugar con las sombras. Los directores habitualmente las utilizan porque la imaginación humana hace aparecer por arte de magia lo más aterrador para cada uno. Es una idea muy inteligente contar con este factor ya que, si no, crearían un monstruo igual para todo el mundo y aislarían así el público, que no se sentiría asustado por el personaje. Resulta de lo más efectivo para evocar miedo.